Aprender de Finlandia

por Francisco J. Pérez-Latre

descarga (1)Finlandia siempre es interesante para los que nos dedicamos a la formación. El éxito del modelo educativo de este país de 5 millones y medio de habitantes es objeto de estudio en todo el mundo. La semana pasada viajamos allí en el “Helsinki Inspiration Tour” de C4E.

No es fácil resumir los hallazgos de las visitas a los creadores de Angry BirdsFuturice, 358 (una agencia que se llama como el prefijo telefónico del país) o Hasan & Partners (con su lema “Never satisfied”). Pero hay tres palabras que quizá deberían estar en un resumen: colaboración, multidisciplinariedad, internacionalización.

La colaboración es un activo de las empresas finlandesas, siempre en busca de alianzas y acuerdos que les permitan llegar más lejos o ampliar sus conocimientos (es un país donde no hay miedo a aprender cosas nuevas y salir de zonas de confort). La multidisciplinariedad es condición del momento que vivimos, una época donde son necesarias nuevas síntesis. Los problemas de nuestros clientes son complejos y la “mentalidad de una sola disciplina” no permite resolverlos. En Finlandia saben que hay que integrar diseño, innovación, creatividad, tecnología, sentido de negocio…y eso pasa por Por último, internacionalización. En las empresas que visitamos, el mercado es el mundo. Angry Birds fue un ejemplo paradigmático en este sentido. Pero no escuchamos a nadie decir que trabajaba para el mercado nacional. Los finlandeses destacan por su mente global y eso les ayuda a superar las barreras mentales que podría tener un país del norte, con una población relativamente escasa.

Quedan cosas en el tintero y seguiremos aprendiendo de este país altamente digitalizado que fomenta ambientes de trabajo poco jerárquicos (una tierra de jefes sin despacho). Con su serenidad, sentido práctico y capacidad de aprendizaje los finlandeses aportan muy buenas lecciones. Tendremos que seguir pensando.

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