La verdadera jefa de Google

por Juan de los Ángeles

Temida como la financiera estricta y controladora que iba a poner orden en Google –a riesgo de hacerle perder su estilo–, desde que en mayo de 2015 Ruth Porat se incorporó a la compañía como Chief Financial Officer, su reputación no ha hecho más que crecer.

Su llegada ha aportado sin duda disciplina pero, también, crecimiento, combinada además con una clara apuesta por la cultura y la personalidad de la compañía. Un punto de equilibrio que Google necesitaba y que ha posicionado a Porat como una líder con alma, que es más Googley que nadie y que, además, apuesta por la cultura como una de las inversiones más rentables.

Defiende, entre otras cosas, la necesidad de que los espacios de trabajo fomenten la empatía y la relación, que la comida sea gratis para todos los empleados –Google reparte 178.000 comidas al día, por cierto–, que se siga invirtiendo en proyectos I+D sin esperar beneficios inmediatos, que se invierta en atraer al mejor talento…

Un estilo –disciplina + innovación– que ha llevado a Alphabet a batir el último trimestre, una vez más, su propio récord de beneficios: 6.700 millones de dólares, de una facturación de 27.000 millones. Unos resultados que no son sólo mérito de Porat, pero en los que sin duda ha tenido mucho que ver. Una persona de esas que interesa seguir. Aunque sólo sea para ver qué hace.

MÁS EN:

Meet Alphabet’s Guru of Googley Rigor